5 remedios caseros para eliminar el mal olor de pies, boca y axilas para siempre

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MALOS OLORES IGUAL A: SOLEDAD, ¿por qué? fácil, si en tu primer cita hueles a "rayos" la pobre de tu "presa" va a huir y jamás le vas a volver a ver, ¿Triste no? 


Bueno, esta nota no se trata de problemas existenciales, queremos hacerte el paro y que no sigas por ahí contaminando al medio ambiente, recuerda que la primer impresión es tu carta de presentación. 

Así que para evitarte una que otra penuria y esas situaciones incomodas tenemos estos remedios infalibles y caseros que van a eliminar de tu cuerpecito esos olores hoy y para siempre.

1.- Elimina el olor de tus axilas 


2 cosas: limón y bicarbonato de sodio, es muy sencillo, solo tienes que partir el limón por la mitad y untar un poco de bicarbonato en él y listo, frótala en tu parte "apestosilla" 

2.- Elimina el mal aliento

Agua caliente, otro de majestuoso limón y un poco de canela, esto en conjunto puede ayudarte a que ese mal aliento desaparezca. Lo único que tienes que hacer es  verter el agua caliente en un vaso, exprimir el jugo del limón y al final la cucharada de canela. 

El resultado de esta solución funciona igual o mejor que un enjuague bucal, úsalo después de que laves los dientes y ya está, hola nueva boca perfecta. 

3.- Elimina el mal olor de los pies 

Ok, esto es un poco más laborioso pero muy sencillo, coloca una cubeta con agua caliente con un paquete de bolsitas de té negro, deja que se disuelva por unos minutos, ya que veas que agarra colorcito sumerge las "patrullas" dentro por media hora. 

Repite este proceso durante 7 días seguidos y esperemos por los resultados. 

4.- Elimina el olor de los pies NIVEL EXTREMO


Sí la cosa esta muy severa, te recomendamos a hacer lo mismo que lo anterior pero en vez de utilizar té negro tienes que usar vinagre. 

5.- UFF, la verdad que el olor de los pies es horrible, entonces queremos que tengas una opción  "C" 

Échale dos cucharadas de maizena a la cubeta con agua caliente, todos tenemos en la despensa un poco de ese mágico polvo blanco, sumerge los pies por 30 minutos y listo. 

Después de esto ya no tienes pretextos para seguir haciendo el oso... ah, una cosa más, una ducha diaria también es de gran ayuda. 

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